No soy amigo de las etiquetas que deben tener las cosas, los conceptos, porque poner una etiqueta es condicionar durante un tiempo que esa cosa o concepto sea inamovible del significado que le otorga esa etiqueta, y la vida demuestra que las etiquetas sirven para que un día dejen de serlas.
Estamos en este punto dónde algo parece que responde al tema Videomarketing y otro al tema Publicidad. Y escribo este post porque respondo así a una pregunta formulada en Twitter por una exalumna de mi pasado curso de Videomarketing, a raíz del último vídeo de la firma Burberry con motivo de la Navidad (otra etiqueta).
He visto el vídeo, y no he sentido mucho. Parece un vídeo publicitario de televisión, al estilo del calvo de la lotería, Freixenet, o el Corte Inglés. ¿Lo es? ¿Un vídeo publicitario deja de serlo porque se transmite en Internet?
La etiqueta Marketing dice en infinitos libros, posts, y revistas que (resumidamente):
Una acción comercial dentro de un mercado es una acción de Marketing, de quién quiere vender algo, a un posible comprador.
Aquí es dónde la imaginación vuela, porque por suerte, la acción comercial tiene varias etiquetas, únicas o mixtas. Por eso existe, Marketing directo (¡Tú! Mira este producto), Streetmarketing (mostrar el producto en la calle con una acción ingeniosa de «espontaneidad»), Marketing Gráfico (vallas, dípticos, catálogos, periódicos, revistas), Marketing Mix (varias etiquetas en una), Marketing de Guerrilla (acción comercial a bajo coste), Neuromarketing (dónde más que una acción comercial tratar de alterar las neuronas del comprador) Televisión y Radio, y, Vídeomarketing (entendido como acción comercial en vídeo para Internet).
El problema de Internet, para bien o para mal, es que ha movido los cimientos de las etiquetas, de manera que ya uno no sabe si vídeos como este responden o no al concepto publicitario de toda la vida, o se ajusta a una campaña de videomarketing.
Llegados a esta época muchos años después de la Revolución Industrial, existe en la gente un agotamiento intelectual o de asimilación de la publicidad como etiqueta pura. La gente está aburrida de que le manden spam (Emailmarkerting), no le dejen ver su película favorita (15 o más minutos de anuncios publicitarios), etc.
La gente quiere consumir contenidos entretenidos que le digan algo, le formen, o le enseñen, y si existe publicidad (algo que todos damos por hecho) porque alguien paga para que se produzcan contenidos, que sean lo menos invasivos posibles, y no interfieran en la experiencia personal de cada cuál con el contenido que consume.
Si el contenido es bueno y empatiza con alguna de las experiencias humanas más básicas como humor, sexo, amor, hambre, alegría, extrañeza, asombro, etc, el recuerdo de Marca (Marketing) vendrá por querer compartir el contenido con tus amigos en las Redes Sociales y preguntarte al menos una vez: ¿quién hizo este vídeo?
¿Qué opino sobre este vídeo?
Por supuesto es un vídeo técnicamente perfecto, ajustado en historia a lo típico esperable de la Navidad, felicidad y amor. Que aparezca un Beckham, es un reclamo para la legión de fans del apellido (técnica clásica del uso de famosos para llegar a las masas), y esto llama a la etiqueta clásica «Vídeo publicitario», pero no vende de manera literal y directa, sino por sugerencia del color de Marca y uso de prendas de la Marca: «No te vendemos nada, pero mira que elegantes somos».
Gracias por leer hasta aquí! Ahora te invito a leer más en el blog, ver vídeos.